Fotografía del manuscrito 'Los Ayacuchos', de los Episodios Nacionales

Fotografía del manuscrito 'Los Ayacuchos', de los Episodios Nacionales

Cartas fechadas en 1880 del fondo del epistolario del museo

Cartas fechadas en 1880 del fondo del epistolario del museo

Una investigadora consulta unos documentos en la Biblioteca del museo

Una investigadora consulta unos documentos en la Biblioteca del museo

Casa-Museo Pérez Galdós

Casa-Museo Pérez Galdós

16 de abril de 2020

LA BIBLIOTECA DE BENITO PÉREZ GALDÓS, IMPRESCINDIBLE PARA CONOCER LA HISTORIA DEL S. XIX

Imágenes

Fotografía del manuscrito 'Los Ayacuchos', de los Episodios Nacionales

Fotografía del manuscrito 'Los Ayacuchos', de los Episodios Nacionales

Cartas fechadas en 1880 del fondo del epistolario del museo

Cartas fechadas en 1880 del fondo del epistolario del museo

Una investigadora consulta unos documentos en la Biblioteca del museo

Una investigadora consulta unos documentos en la Biblioteca del museo

Casa-Museo Pérez Galdós

Casa-Museo Pérez Galdós

 

La biblioteca personal de Benito Pérez Galdós la conformaban unos 3.968 libros. Así se encargó de documentarlo entre los años 30 y 40 el autor e investigador estadounidense de origen lituano, Chonon Berkowitz, que realizó el listado de los libros que tenía Galdós en sus residencias de “San Quintín”, en Santander, y Madrid, catálogo que publicó El Museo Canario en 1951, La Biblioteca de Benito Pérez Galdós. Cuántos de esos libros se encuentran en la Casa-Museo es una tarea que, en estos últimos años, con el avance de las nuevas tecnologías, y gracias al programa Absys, se está realizando en el centro, comparando el listado que hizo Berkowitz con el de Sebastián de la Nuez en su libro Biblioteca y archivo de la Casa-Museo Pérez Galdós.

La mayoría de los fondos provienen en un primer momento de la adquisición mediante compra a la hija del novelista María Pérez Galdós Cobián. Posteriormente el Cabildo de Gran Canaria ha ido incrementando a lo largo de los años el legado documental con adquisiciones y donaciones diversas de particulares o familiares del escritor (como es el caso de la última compra de manuscritos, dibujos y grabados) o adquisiciones en subastas como el caso del manuscrito Electra en el año 2001. En los últimos años se han adquirido también las cartas de Pérez Galdós a Concha Morell y otros epistolarios que constituyen una gran fuente de información para investigadores y público interesado.

Al ser un legado tan extenso, señala Ana Isabel Mendoza, documentalista de la Casa-Museo desde hace más de 20 años, desde los años 30 diversos invesigadores nacionales e internacionales se han acercado a la figura y la obra del escritor canario. Entonces, el primer director de la casa, Alfonso Armas Ayala, junto al poco personal con el que contaba (una o dos personas) proporcionaba a expertos, como Joseph Schraibman, Carmen Bravo-Villasante o William H. Shoemaker, la documentación requerida. Hasta que llegó la fotocopiadora, ya se podían entregar las copias en mano, o se mandaban por correo postal a otros países. También se usaba el teléfono y el Fax para hacer muchísimas gestiones, pero lo más habitual era que los profesores de universidades extranjeras pidieran permismos de estancias por estudios y pasaran temporadas en la Casa-Museo.

Galdosianos de medio mundo

Hoy en día, Benito Pérez Galdós sigue suscitando un gran interés en el mundo de la cultura en general. Desde 1973, los Congresos Internacionales Galdosianos continúan atrayendo investigadores de todas las partes del mundo: Japón, China, África, EE.UU., Hispanoamérica, Jerusalén, etc. Cada vez hay investigadores más jóvenes que se acercan a la vida y la obra del escritor canario desde diferentes ámbitos.

Entre los literatos más destacados que admiran y hablan de la influencia que para ellos ha tenido en su literatura Pérez Galdós podemos encontrar a Antonio Muñoz Molina, Rafael Chirbes o Almudena Grandes que incluso ha acometido la tarea de publicar sus Episodios de una guerra interminable en los que hace un homenaje a nuestro novelista universal.

Y tampoco se puede olvidar, insiste Ana Isabel Mendoza, la implicación y admiración hacia Pérez Galdós que han demostrado también los escritores canarios entre los que destacamos a Santiago Gil, José Luis Correa, Emilio González Déniz, Juan Carlos de Sancho o Alexis Ravelo, entre otros… En este sentido y muy relacionado con los fondos bibliográficos y documentales de la Casa-Museo, se encuentra el proyecto que desarrolla el centro desde hace casi diez años, “Archivos literarios de autores contemporáneos”. Una iniciativa que pretende dar voz a escritores canarios contemporáneos con el compromiso de estos de entregar alguna de sus obras manuscritas o ediciones especiales a los fondos de la Casa-Museo para que esta los custodie, promueva su estudio y los utilice en programas de difusión de la literatura canaria.

Así, además de los fondos que la casa alberga (la biblioteca personal de Pérez Galdós, la biblioteca especializada en obras del siglo XIX y principios del XX, con la biblioteca de Alfonso Armas Ayala y con los fondos bibliográficos de Josefina de la Torre) el centro también cuenta con obras depositadas por autores como Jose Luis Correa, Antonio Lozano, Santiago Gil, Emilio González Déniz, Fernando Delgado, J. J. Armas Marcelo, etc.

Fondo epistolar

En un archivo tan extenso desde el punto de vista literario, filológico, histórico, social o cultural es difícil destacar una sola “joya” de la Casa-Museo Pérez Galdós, cuyo patrimonio documental es de vital relevancia para conocer no solo la historia del escritor sino la Historia del siglo XIX. Es de resaltar la producción autógrafa, en el que destaca el Epistolario Galdosiano constituido por más de 9.000 cartas, tarjetas postales y diversos documentos, que constituyen el testimonio de distintas voces que forman nuestra historia moderna. De las cartas, la mayoría que se conserva fueron recibidas por el escritor: coetáneos de Galdós (José María Pereda, Clarín, Pardo Bazán), actores y actrices (Concha Morell, Margarita Xirgu, Carmen Cobeña…), políticos (Antonio Maura, Pablo Iglesias…), etc. Entre este grueso epistolario sobresalen las más de 1.500 cartas que se conservan escritas por Pérez Galdós y dirigidas a distintos destinatarios: su hija, su familia, amigos, escritores y escritoras, etc. Cartas de puño y letra de Galdós que nos muestra la personalidad de un artista polifacético.

 

El archivo de Pérez Galdós es un reflejo de la vida y la obra del escritor, señala Ana Isabel Mendoza, que “no solo nos enseña cómo era su proceso literario, periodístico, intelectual y artístisco sino también cómo era Galdós como persona en su relación con los demás”. El escritor era un gran aficionado a la fotografía y el museo cuenta con una amplia selección de imágenes de sus recorridos por Italia o Inglaterra, o sus rutas por España, tomadas por el escritor, unas veces para documentarse para sus novelas y otras de sus visitas a otros coetáneos o de estrenos de sus obras de teatro.

A través de los libros de Benito Pérez Galdós, que van desde la música, la religión, las Ciencias Sociales, la Filosofía, las Bellas Artes, la Lingüística, la Literatura (alemana, inglesa, norteamericana, italiana, francesa, catalana, etc.), hasta la Geografía, la Historia y la Medicina, descubrimos a un trabajador infatigable que revisa y revisa hasta la saciedad sus escritos y se documenta para la elaboración de sus obras. Una prueba de esto, señala Ana Isabel Mendoza, la tenemos en sus tratados de Medicina en los que aparecen partes subrayadas relacionadas con la enfermedad mental, tema que tratará en algunas de sus novelas como La desheredada. Para la documentalista de la Casa-Museo “sus libros nos dan muestra de una persona con una amplia curiosidad y aspiraciones heterogéneas. La importancia de contar con este gran legado original hace de la Casa-Museo un lugar fundamental para el estudio y el conocimiento de la literatura del siglo XIX”.